lunes, 9 de julio de 2007

Cambio de rumbo

Nunca me he planteado esto del blog como nada serio, es más, nunca he planeado mínimamente qué escribir. Si un día navegando encontraba algo que me gustara o se me pasaba algo por la cabeza y tenía el ordenador encendido me pasaba a publicarlo. Pero si me pillaba en el coche, o después de cenar, o en fin de semana pasaba de apuntarlo o ponerme a escribir. Ahora sé que esto que escribo es más para mí que para la gente, lo cual no quita que me encante recibir visitas (mucho más recibir comentarios, esto va por el incombustible Felipe, gracias tío!)

Pero esto que escribo hoy no es para mí. Es para la que siempre está ahí, la mayoría de las veces invisible pero que me da fuerzas cuando más las necesito (aunque no seas consciente de ello). ¿Cómo te las arreglas siempre para hacer que mi opinión cambie en un momento? Este post va dedicado a tí, ahora que sé que me lees aunque no digas nada; eso es bastante para mí. De hecho, es un motivo más para pasarme por aquí de vez en cuando a seguir soltando mis paridas. Juro que éste era el último mes que le iba a conceder a este rincón, pero una vez más has conseguido enderezar mi rumbo (sé que un blog es una brizna en el campo de la vida, pero a ésta la has salvado tú (joder que mariconadas suelto de vez en cuando (se me acumulan los paréntesis...) ) )

En fin, que eso, nueva oportunidad para el bloguecillo éste, a partir de ahora más bonito, más grande y con porno casero para atraer a las masas (bueno, esto último aún está por decidir). Y prometo no más posts lacrimógenos ni trascendentales (por diosss, aún no sé como he sido capaz de poner semejante foto, me doy miedo a mí mismo).

2 comentarios:

Anónimo dijo...

gracias por seguir escribiendo

Luis Felipe dijo...

de nada ;)